El agua es el recurso hídrico indispensable para nuestro diario vivir, es tal su abundancia en nuestras ciudades colombianas que hemos sido un poco abusivos con este valioso recurso.
El tratamiento de las aguas residuales siempre ha sido un tema que nos deja muy mal parados debido a la falta de acceso a estas tecnologías debido a sus altos costos y a su difícil manejo, por ejemplo, en Bogotá solo se trata alrededor del 25 % de sus aguas, con la Planta de Tratamiento de aguas residuales Ptar canoas se aumentarían estos tratamientos hasta un 70 %, pero es aún insuficiente.
¿Qué pasaría si los bogotanos tuvieron alternativas de tratamiento, reutilización, aprovechamiento, reciclaje y reúsos de sus aguas?
Una forma imperiosa de aprovechar el agua es a través de las aguas lluvias, sistemas que no son costosos y si muy necesarios. Los equipos son: canaletas, tanques, y procesos de desinfección que para una casa de 80 m2 tendría un costo alrededor de los 3 millones de pesos; los beneficios al medio ambiente y a la sociedad son sublimes.
Otra forma de aprovechamiento es el tratamiento no convencional de efluentes cargados de metales pesados y colorantes, empresas de pinturas, curtiembres, galvanizado, entre otras, podrían beneficiarse a través del triturado y secado de plantas acuáticas que viven en los humedales de nuestra ciudad, una planta es el buchón de agua. Esta planta contiene más del 50 % de su biomasa celulosa, lugar donde quedan almacenados los metales pesados.
Una forma también de cuidado fastuoso del agua es a través de trampas de grasas para restaurantes y empresas de automóviles. Esta tecnología consiste en dejar que la grasa quede en la parte superior del agua a tratar. Con esta tecnología queda el agua en un mejor estado para su tratamiento y también hace aprovechable la grasa de los restaurantes (para hacer biocombustibles, grasas de carro, jabones o reutilización misma) y la grasa de los talleres de automóviles (reutilización en si misma).
También es indispensable pensar en los lavados de carros, lugares donde se podrían implementar plantas de reutilización para su mismo proceso. Lo importante es que todos los sistemas productivos y hasta en nuestras casas a través de reutilización del segundo ciclo de lavado de nuestra lavadora., se podría lavar los pisos, baños, platos, etc. Con estas alternativas (que me faltan muchas más) podemos colaborar con el medio ambiente y con la sociedad y dejar de hablar carreta.
Para más información y profundización de estas tecnologías puede comunicase con:
ufcarrenos@libertadores.edu.co
Uriel Fernando Carreño Sayago, Dirección de Investigaciones