Aprender un idioma nuevo puede parecer muchas veces algo intimidante, sin embargo es importante tener en cuenta que ya hemos recorrido ese proceso cuando eramos niños. Al fin de cuentas, si pudimos aprender un idioma siendo tan pequeños, cuando lo hoy obvio entonces parecía imposible, es muy probable que podamos hacerlo de nuevo.
Dicho esto, hay un sinfín de ventajas para aquel que opte por aprender un idioma (o más), pues a la par que ayuda a mejorar muchas funciones mentales y a disminuir la velocidad de envejecimiento de las funciones cognitivas, también puede abrir muchas puertas en el ámbito laboral, ya que cada vez es más importante manejar mínimo un segundo idioma.
Sin embargo, que sea posible no lo hace fácil, y es por eso que queremos darte un par de consejos para aprender idiomas más rápido, sin sufrir en el proceso.
Cómo aprender idiomas más rápido:
1. Música, libros y series para aprender idiomas
No debería ser sorpresa que sea más fácil recordar detalles de cosas que te gustan mientras que cuando sientes rechazo o indiferencia con un tema, suele costar recordar incluso lo más obvio. Es por eso que te recomendamos que consumas música, libros, películas o series en el idioma que deseas aprender, pues esto puede hacer mucho más llevadero este proceso.
Aún así, no es necesario hacerlo de forma tan activa como se podría creer. Desde poner música de fondo mientras se hacen otras actividades hasta ver tu serie favorita con subtítulos, cualquier contacto con el idioma que quieres aprender es más útil de lo que crees. Después de todo, así aprendimos al ser niños.
2. Recordatorios en la casa para aprender
Es bastante simple, basta con anotar en un papel el significado de un objeto de tu casa y pegar dicho papel sobre ese objeto. Así, cada vez que interactuemos con este, repasarás su traducción.
Puede llegar a ser sorprendentemente efectiva esta estrategia, pues estamos acostumbrados a pensar que debemos memorizar la traducción de una palabra cuando suele ser más útil relacionar directamente la palabra que queremos aprender con el concepto/objeto que menciona. Es decir, es más efectivo relacionar una palabra con una imagen/sensación/situación que con otra palabra.
3. La tecnología para aprender idiomas
Tu celular y tu ordenador pueden marcar enormes diferencias con muy poco. Puedes cambiar el idioma de estos y aprender de forma pasiva al interactuar con las traducciones de elementos con los que ya has interactuado muchas veces y que, por tanto, ya sabes su significado.
Por otro lado, hay muchas aplicaciones que pueden servir como “clases express” para cuando tienes apenas unos minutos para repasar. Te recomendamos Duolingo, Busuu, Babbel o Mondly, aunque también podrías usar aplicaciones especializadas en un solo idioma.
4. Contacto directo con nativos del idioma
Si bien las anteriores estrategias son muy cómodas, pocas cosas son tan efectivas como usar el idioma que estudias en escenarios reales. Puedes empezar por escribir un diario personal, donde relates lo que piensas o lo que vives en el idioma que deseas aprender, esto te llevará a consultar la traducción de términos que usas con frecuencia a la par que los relacionas con experiencias emotivas y reales.
Para finalizar, la estrategia más efectiva suele ser tan simple (y tan complicada a la vez) como viajar al país donde hablan el idioma que deseas aprender, y es que definitivamente lo más efectivo para aprender un idioma nuevo es el tener que enfrentarte constantemente a interacciones ineludibles y reales en un ambiente exótico y nuevo para ti.
Si bien esto último es lo más efectivo, entendemos que no es fácil (ni barato) tomar esta vía, así que mientras tanto, podrías acudir a conversaciones con nativos del idioma que deseas aprender en cafés, webs o apps dedicadas al intercambio de idiomas.
Estas estrategias se basan en la repetición constante, en la conexión del idioma que aprendes con tu cotidianidad y con la comodidad e incluso agrado de las interacciones con dicho idioma, pues como lo mencionamos al inicio, es así como todas las personas en este mundo aprendemos nuestro primer idioma y como seguramente tú, aprendas el segundo.
5. Escribe un diario en tu idioma objetivo
Escribir un diario en el idioma que estamos aprendiendo es una técnica novedosa y efectiva que ha demostrado ayudar a muchas personas a mejorar su nivel de competencia lingüística. Esta estrategia combina los beneficios de aprender un idioma con los efectos positivos de llevar un diario personal. Al expresar nuestros pensamientos y experiencias en el idioma objetivo, estamos constantemente practicando y reforzando nuestro conocimiento lingüístico.
Una de las ventajas de escribir un diario en el idioma que estamos aprendiendo es que nos permite practicar la escritura de una manera auténtica y personal. A medida que narramos nuestras vivencias, reflexiones y emociones en el diario, nos enfrentamos a la tarea de buscar las palabras y estructuras adecuadas en el idioma objetivo. Esto nos ayuda a ampliar nuestro vocabulario, mejorar nuestra gramática y ganar confianza en la expresión escrita.
¿Qué se tiene que hacer para aprender idiomas?
Para nosotros las claves son 2: Variedad y constancia. Para lograr un aprendizaje sólido y efectivo de un idioma, es fundamental llevar a cabo una práctica constante y variada. No basta con limitarse a un único enfoque o método de estudio, sino que es necesario rotar entre distintas técnicas y fuentes de conocimiento. Al exponernos a una variedad de actividades, como la lectura, la escritura, la escucha y la conversación, fortalecemos diferentes habilidades lingüísticas y nos adaptamos a diversas situaciones comunicativas.
Además, es beneficioso diversificar las fuentes de conocimiento y las herramientas que utilizamos para aprender un idioma. Recurrir a libros de gramática, cursos en línea, series, películas, comics, aplicaciones móviles, programas de intercambio cultural y clases con profesores nativos son solo algunas de las opciones disponibles. Cada recurso ofrece perspectivas únicas y enriquecedoras, lo que nos permite adquirir un conocimiento más completo del idioma. Al rotar entre diferentes fuentes, mantenemos nuestro aprendizaje fresco, evitamos la monotonía y ampliamos nuestra comprensión y dominio del idioma.
¿Cuál es el idioma más fácil de aprender?
- El idioma inglés se considera ampliamente como uno de los idiomas más fáciles de aprender, y esto podría explicar su popularidad y uso extendido en todo el mundo. Una de las razones clave de su facilidad radica en su estructura gramatical relativamente simple en comparación con otros idiomas. El inglés carece de género gramatical y tiene una conjugación verbal más sencilla en comparación con lenguajes como el francés o el alemán. Además, muchas de sus palabras son de origen latino o griego, lo que facilita la comprensión para hablantes de lenguas romances como el español.
- Además del inglés, el portugués y el italiano son considerados entre los idiomas más sencillos de aprender para los hispanohablantes. Esto se debe a que comparten similitudes léxicas y gramaticales con el español. Los hablantes de español pueden encontrar más fácilmente correspondencias y entender las estructuras gramaticales similares. Por ejemplo, la conjugación verbal en estos idiomas sigue patrones similares, lo que facilita el proceso de aprendizaje.
- Es importante destacar que, más allá de la facilidad inherente de un idioma, el gusto por una lengua o cultura específica desempeña un papel fundamental en el proceso de aprendizaje. Cuando alguien se siente atraído e interesado por un idioma en particular, ya sea por su música, literatura, cine o aspectos culturales, el proceso de aprendizaje se vuelve más fácil y placentero. El entusiasmo y la motivación intrínseca son elementos clave para mantener el compromiso y la dedicación en el aprendizaje de un idioma, independientemente de su nivel de dificultad.
¿Cómo aprender un idioma desde cero?
- Cuando se comienza a aprender un idioma desde cero, es recomendable familiarizarse primero con las frases y palabras más comunes. Este enfoque permite «desbloquear» rápidamente el acceso a otras estrategias de aprendizaje. Al conocer las expresiones básicas y vocabulario esencial, se adquiere una base sólida que facilita la comprensión y el uso progresivo del idioma. El aprendizaje de frases comunes también ayuda a familiarizarse con las estructuras gramaticales más utilizadas, permitiendo una progresión más fluida en el estudio del idioma.
- Además de familiarizarse con las frases y palabras básicas, es importante utilizar el idioma desde el primer día. La escritura y la práctica oral son herramientas fundamentales para desarrollar habilidades lingüísticas. Incluso si al principio se cometen errores, la práctica constante ayuda a corregirlos y mejorar la fluidez. La escritura diaria en el idioma objetivo, como mantener un diario personal, ayuda a consolidar el vocabulario y las estructuras gramaticales aprendidas. Asimismo, buscar oportunidades para hablar el idioma, ya sea con hablantes nativos o compañeros de estudio, fortalece la capacidad de comunicarse y adquirir confianza en la expresión oral.
- Otra estrategia efectiva para aprender un idioma desde cero es navegar el idioma a través de otros intereses. Si hay temas o áreas de interés específicas, como el fútbol, la cocina, la música, la psicología, la economía o el marketing, aprovechar los recursos disponibles en el idioma objetivo puede ser muy beneficioso. Leer libros, escuchar podcasts, ver documentales o leer artículos relacionados con estos temas en el idioma objetivo no solo ayuda a mejorar las habilidades lingüísticas, sino que también brinda la oportunidad de aprender sobre diferentes perspectivas y enriquecer el conocimiento en áreas de interés personal.
El aprendizaje de idiomas conlleva una amplia gama de beneficios tanto a nivel profesional como personal. En primer lugar, adquirir habilidades lingüísticas adicionales estimula y fortalece la capacidad mental, ya que implica el ejercicio de la memoria, la concentración y la flexibilidad cognitiva.
Además, el dominio de varios idiomas amplía las oportunidades laborales, ya que en un mundo cada vez más globalizado, las empresas buscan profesionales que puedan comunicarse efectivamente con diferentes culturas y mercados. Asimismo, el conocimiento de idiomas extranjeros abre puertas hacia becas y programas de estudio en el extranjero, brindando la posibilidad de enriquecer la formación académica y vivir experiencias enriquecedoras.
Por último, aprender idiomas fomenta la interculturalidad y permite establecer conexiones significativas con personas de otras culturas, ampliando así nuestra visión del mundo y promoviendo la tolerancia y el entendimiento mutuo. En resumen, el aprendizaje de idiomas es una inversión invaluable que nos brinda beneficios profesionales y personales a largo plazo.
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Además, como parte de nuestro enfoque hacia la formación integral, te ofrecemos la posibilidad de vivir experiencias internacionales, mediante programas de intercambio y movilidad estudiantil. Así, podrás sumergirte en culturas diferentes, fortalecer tus competencias académicas y establecer conexiones internacionales que te abrirán puertas hacia un futuro prometedor.
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